18 de diciembre de 2012

Me halaga Málaga

Debo decir que fui en busca de Corea con muchas ganas de cambiar el chip, de no sé, me diese el aire. Setecientos cincuenta kilómetros después, día y medio y cuatro semanas o un mes más tarde, realmente parece que ha funcionado.
Es una cuestión de querer cambiar un poquito el camino, la ruta, pese a que no sea la preferida, a destinarse a entrar en un salón de amigas de amiga, en lugar de una habitación de amiga del alma. No estoy seguro de que comprenda mis decisiones, pero empiezo a entender las consecuencias de las mismas. Y esto tengo claro.
Voy a volver a Málaga, me gustaría que una camisa se hubiese quedado allí no unos días, sino el tiempo suficiente para que mi madre me pagase el billete para ir para allá. Se comenta que es un buen sitio para salir, un buen lugar para veranear, y no lo dudo, y pienso comprobarlo,¡claro que sí!
Y lo digo porque si algo me impulsa a ir a Málaga es saber que me puedo sentar en un sofá, escuchar como me pinchan, como me miran regulín, como se me juzga y como me ponen una ensalada para almorzar sin tener en ningún momento la duda de que estoy disfrutando como un enano tragándose piezas de un Lego.
En serio, gracias por la Navidad que se avecina, por que hay que apostar porque sales, y espero que salga, sino, vaya fracaso, ¿no? No salir en Málaga ni en Nochevieja, sería como para empezar a odiarte, cuando más cariño te estoy cogiendo.
Pues eso, pues nada, que gracias por la velada, que ha pasado un mes, pero que ya lo he dicho, a Málaga, volveré.

29 de noviembre de 2012

Rompe

Grita, chilla, por el amor de Dios. Enfurécete, choca, no sé, no pienses. Acércate a la mesa, dale una patada, dale un puñetazo, rómpete un dedo, llora, deja de respirar, maréate. Usa el participio del verbo elegir, siéntete único, especial, sí, así, ¡ya!
Acelera, derrapa, aprende a conducir después de trasnochar, exaspera, saca de quicio, deja la señal de tus dedos en una pared perfectamente blanca. Aclara la situación cuando llegues al final, no antes, por favor, antes de ello, lía a amigos, familiares, desconocidos y demás.
Siente el desprecio, la pasión, la ternura, el valor, siente que los demás sienten, imbuye en ellos las ganas de gritar. No pases por aquí sin hacer eco, no seas una sombra más en una noche de oscuridad. Apaga la luz, sí, pero sólo cuando tus labios sean rojo brutal, carmín, ¿va?
Pues eso, somos lo que rompemos, lo que destruimos en esta vida por la que pasamos, y luego, cuando nos vamos, empezamos a crear.

16 de noviembre de 2012

Anni

Existen infinidad de motivos para seguir escribiendo, sigo teniendo las mismas ganas que el mismo día de sorprender, de transmitir, de dejar sin respiración. Y sigo queriendo hacerlo sabiendo que hay una persona al otro lado de la pantalla, o dos, o tres como mucho ¡qué me importa a mí! Que siempre he sido el último de la fila...
Yo quiero vivir con ritmo trepidante, pero improvisando; quiero sufrir de arañazos, pero de arañazos por pelear contigo en el cesped, tonteando, como siempre, como nunca ha pasado... Que quiero gritar, quiero romper un cristal, cortarme, viajar a toda velocidad camino de la desesperante sangre. Quiero estar jodidamente vivo, peligrosamente cerca de la luz del final del tunel.
No sé si lo entiendes, por momentos pienso que sí, que lo haces a la perfección, que entiendes lo que digo mucho mejor que yo mismo, por momentos me asfixio y me ahogo ante el panorama de estar hablando solo. Pero siempre me levanto, faltaría más.
Y volverá a ponerse el Sol, y pasaremos miedo sin Luna, y lo mejor, lo mejor de todo, ¿sabes qué es?
Sí, efectivamente, que nos volveremos a leer.
Buscando un motivo, incluso desconocido, buscando un "anni".

14 de noviembre de 2012

Mírate

Anoche, y te miras, un espejo, que desordenado tienes el cuarto, ¿cómo habrá terminado así? La almohada mojada, el armario abierto, un puñado de ropa en la cama, y una duda sonriente. ¿Qué me pongo? Ay por dios...
Y te espero, y te miro, desde el umbral de la puerta, y me callo, no te aviso, sólo sonrío, eres como eres, ¿para qué voy a discutir? Elijas lo que elijas vas a elegir bien.
Y no se para el tiempo, y no se va los nervios, y no sabes muy bien por qué no puedes decidir. Y es tan tierno, y eres tan dulce, que me tengo que reir.
Y te asusto, y me vuelvo a reir de tu susto. Y te acercas, y me pegas, y me pinchas, y me mandas al salón, y te advierto una una cosa...
-Vamos tarde, princesa, ponte lo que quieras, lo primero que elijas, pero por favor, ten una cosa clara, desde tu vista del espejo  no se ven, pero yo veo tus alas de ángel como la primera vez. No las pierdas, no te las quites, no permitas que nadie te las arranque, no otra vez. Porque con ellas vamos lejos, con ellas eres cielo y un sueño a la vez.

12 de noviembre de 2012

Ley D:deber, dudar y decidir

http://www.youtube.com/watch?v=i4f0KHcziBg

Te levantas un buen día, porque es lo que debes hacer, y la mañana debía ser una más, pero no lo es. Nada más cerca de la realidad, y nada más terriblemente real que sentir que lo que deberías hacer ahora no está tan claro.
Puede haber sido el pie izquierdo, puedo haber sido una mala cena la noche anterior, puede haber llegado el momento de explotar, o puede haber sido algo que desconoces por el momento. Sea lo que sea, lo que antes era, ahora no lo es tanto.
Y claro, dudas: ¿cereales o tostadas?, ¿gafas o lentillas?, ¿hablar o escuchar?, y la pregunta se va complicando, y la respuesta, evidentemente, se va marchando.
Existe la obviedad de que algo fallaba antes para fallar todo tanto ahora. Existe la certeza de que si antes te empeñabas en insistir tanto en algo, es o bien porque lo tenías muy claro, o bien porque te engañabas, y ambas posibilidades son terribles. Y luego claro, cualquier pregunta que te hagas, se responde con un mar de dudas.
Y te ahogas, en un mar de dudas, en un mar de lágrimas, en un maremoto de sensaciones.
Pero no se puede vivir así, ninguna mentira dura lo suficiente para engañarte a ti mismo, ninguna verdad sostiene un mundo irreal. Ningún parecer acaba valiendo más que el propio, aunque parezca egoísta, es simplemente lo mejor.
Y decides, y mientras más pienses que lo haces por lo que conlleve esa decisión, más te paralizas...maldito dilema, que por no decidir, dudas, y por dudas, deberías decidir. Y de esto no te sacará nadie, en todo caso, te hundirán, pero sólo saldrás tú.
Y ahora abres los ojos. De día, es de día. Te pican los ojos (malas noches, demasiada lágrima suelta y demás), te saben los labios a espinas. Paseas, y no avanzas, caminas, y no te cansas, respiras, y te asfixias cada vez más. Y decides, y ya está. Comprendes que la primera decisión es aceptar que no controlarás las consecuencias. Partiendo de eso, lo que vendrá, vendrá.
Se afrontará. Y habrá causa y efecto, ¿inevitable, verdad?
Pero la ley y el orden volverán. Deber, dudar, decidir...faltaba una última cosa. Vivir, sin más.

8 de noviembre de 2012

Wind of Change


Llega un momento en la vida de toda persona en que tiene que elegir entre su felicidad o su vida.
Y el problema es que nadie sabe qué es la felicidad...¿quién no le tiene miedo a lo desconocido?
Pues sí, me llegará ese momento, pero mientras, valiente yo, osaré a aventurar algo: preferiré arrepentirme por definir la felicidad, que acomodarme en el sofá esperando a dormitar...

26 de octubre de 2012

La brújula de la felicidad

Conocí un día a un hombre que encontró, cuando todavía era joven, un aparato magnífico, una brújula que no señalaba al norte, ni siquiera tenía puntos cardinales, sencillamente marcaba Si o No, Derecha o Izquierda.
Era una aparato magnífico porque cuando me lo enseñó, resultó que señalaba siempre a la decisión correcta, a la acertada, encontrabas una encrucijada y la brújula te indicaba el camino que tomar. Escuchabas unas palabras, te ponías a pensar, y llegado el momento de decidir, la brújula te decía si lo que hacías era la correcto o no. Resultaba fantástico tener algo que pasara lo que pasase, te guiaría siempre.
El chaval que la encontró estaba maravillado por su fortuna, y la usó deliberadamente, sin cansarse nunca, sabedor de que siempre iba por el buen camino.
Un día, hace no mucho tiempo, lo encontré, diez años después...iba impecablemente vestido, parecía un triunfador, y sin duda lo era, y le pregunté que fue de su brújula, si la seguía usando. Estuvimos hablando,y por último, le pregunté...
-¿Y bueno, por qué camino te ha llevado esa brújula?
-Pues tengo todo lo que podría querer, sin duda, y he resultado ser el más completo infeliz que tiene la mala fortuna de pisar la tierra.
-¿Y cómo puede ser eso?
-Porque descubrí demasiado tarde que el camino correcto, el evitar los errores, no te hace feliz, simplemente te hace correcto. Y vivir de forma correcta no está mal...pero es terriblemente aburrido.

24 de octubre de 2012

La lista de la compra

Porque me queda aún tanto por hacer, tanto por vivir, tanto por comprar, tanto por sentir...
Porque no me gustaría dejar de andar sin surfear primero.
Porque tengo la necesidad imperiosa de conocer la tierra de  Pedro el Grande y Zhukov.
Porque aspiro a aguantar sin respiración dos minutos mientras visito una playa que de verdad sea cristalina, en España o en la cochinchina.
Porque nadie debe marcharse de esta tierra sin visitar dos veces París, y a mi me queda una penúltima visita.
Porque quiero arriesgar mi vida cuando la haya vivido con un salto en paracaídas.
Porque nadie evitará que algún día pierda la conciencia de tanto catar cervezas de colores.
Porque quiero montar en triciclo.
Porque morir sin conocer a Jordan sería una tragedia nacional.
Porque no quiero elegir el nombre de un chiquillo, pero quiero un chiquillo cuyo nombre pude haber elegido.
Porque un riff del amigo Knopfler debe ser vivido en primera persona antes de vestirme de madera.
Porque tendría que visitar el lugar en que dijese, aquí descansaré cuando se acabe el trayecto en tren.
Porque vivir un par de semanas en un lugar tan inapropiado como extravagante, en que no pueda pronunciar ni una palabra comprensible debe ser una experiencia tan necesaria como irrepetible.
Porque tener la sensación de que te han dado un puñetazo en la boca del estómago y te has quedado sin respiración, y ha sido porque lo has merecido, debe ser digno de disfrute.
Porque a cada palabra que pudiese añadir a las palabras anteriores que un día me puse a escribir, le diese forma y acabasen publicándose sería algo así como el cielo en la tierra.
Porque quiero que tú, que lees, y tú, que no te pases, llegues a plantearte un par de cosas que te faltan por hacer, y las añadas, y yo las quiero también, estoy seguro.
Porque la avaricia rompe el saco, pero si de algo hay que morir, que sea de ser un tipo con sacos rotos.

18 de octubre de 2012

Ritmo

Justificado. ¿Y qué? Ahora naces preparado. Supongo, estás parado? De verdad, te has dado cuenta de que faltaba un signo de interrogación..¡Que rara la sensación! Ruptura de la canción.
Mover el cuello, parpadear, buscar el sueño entre tanto trasnochar. Joder, que tontería, verdad, mitad de la mentira de la que no se entiende al leer esta tontería, y ahora...vuelve a respirar, que vienen curvas ya, ya ya ya! Vuelve a faltar. Preparados, listos, ya.


Sentido deslucido de aquella mirada que se encuentra con otra esquiva enrojecida por horas y horas de chatear para al final quedar y tener que esperar porque como siempre llega con la hora pegada al impronunciable que acabará siendo el punto y final de mis manos si lo imaginas y hay suerte. Respira, joder, respiro, y recupero el sentido, ¿sentido? No lo encuentro, supongo que andará perdido. Espera.
Te saludo, a ti, personaje particular, que interpretarás esto del modo especial, comenta, anda, completa la frase que sea el mordisco a la manzana, que sea la zanahoria que me impulse a ver en la oscuridad, serás capaz de decirme de dónde vienen las cosas que se sabe que no vienen de nunca jamás...Dímelo, venga, va.

17 de octubre de 2012

Salmón si, siempre salmón


Te pienso quitar la falda, me estoy cansando de hablar, me apetece bajarte las bragas, tengo ganas de verte sudar. No hay paciencia que me valga, no hay ternura entre tanta pasión, te voy a comer los labios, voy a dibujar en tu cuello, a mordiscos la palabra desenfreno, y no voy a permitir que nos durmamos, sin gritar hasta que los vecinos se despierten.
Vas a conseguir desmayarme, vamos a saltar sobre la cama, vamos a mojar la almohada, vamos a visitar farmacias, vamos a perder la vergüenza, me harás lo que te apetezca, por una vez coincidiremos los dos, en que la mejor manera de perder peso, es comiéndose al otro sin descanso.
No es una cuestión de sexo, yo no lo llamaría así, tampoco haremos el amor, ni seremos una pareja feliz, es sólo un momento, un instante, la necesidad imperiosa de ser feliz, la idea de que estando pegados el uno al otro es el único modo de vivir.

4 líneas de leche condensada

La almohada, barra de labios, sábanas arrugadas, persiana a medio alzar. Es de día, es mañana, aunque sigas pensando en que mañana tendrías que madrugar. 4 ojeras, 2 sonrisas, buenos días y pan que tostar. Desayuno con diamantes, la pasión hecha ternura, la ternura hecha caricia. Y todavía falta la guinda, en esta dulce "felicidad", falta el primer beso de la mañana, el último de una noche que no termina de terminar.

16 de octubre de 2012

Para las...de los mundos de...en el instante en qué...

Existe una parte de ti única, igualmente le pasa al resto de las mortales. Lo que te hace única es lo que tenéis en común. Ni siquiera debería hablar en singular, es una tontería, no es ni media verdad.
Jamás olvidaría tu nombre...jamás diría jamás...particularmente te considero un bombón, pero, ¿quién no querría tener una caja de bombones para cenar?Que sí, que de verdad, que eres única, que eres especial, que eres esa campanilla de cuento de Disney, única, irrepetible, una luz muy muy chillona para cada cuál, para algún chaval.
Y ahora coincide, ahora que eres LA, ahora que eres mucho más que una nota musical especial...elije un lugar. Un mundo, una historia en que trabajar. Soñar, quizás, reir, ¿y para qué dudar? Encabezar la página de un cuaderno azul...sin sentido. Uy, me pierdo, en eso consiste, en no tener camino, en vivir en un playa que no da al mar. A ver...imagina que somos dioses, imagina que mañana seremos humanos, pero hoy podemos imaginar y conseguir. Una cabaña con vistas a un volcán, un planeta con dos soles y dos lunas, para disfrutar el doble, para que las noches y los días duren la mitad, para que te despierte susurrando dos veces, para que cuando me vaya a dormir flipe por estar al lado de quién deseaba estar. El doble de oportunidades de fotografiar. ¡Te encanta la fotografía! No me lo niegues, que somos dioses y no hay nadie a quién engañar.
Tras esto, lo espectacular. Nada de especular. Nada de más rimas encadenadas que no ves pero escuchas, que no tienen dificultad. Tras tanta tontería, un par de frases de verdad. El momento, el instante, la centésima en que el tiempo se detiene y arranca a volar. 
¡Te digo princesa! Te acercas a mi. Agachas la vista. Se apaga la luz. Te busco a tientas. El pelo y lo demás. Es casi punto y aparte. Falta un endecasílabo brutal. El beso es en la  nariz. ¡Maldita luz, bendita ternura! Es lo más romántico que jamás me pasará.

14 de septiembre de 2012

LA VIDA EN CASA DEL GATO DE SCHRÖDINGER


Sin una salida ni luz natural. Sin un futuro ni un pasado. Sin creencias ni ciencia. En un silencio sepulcral. Ningún gato tuvo nunca una vida tan maldita, y lo peor es que podrían quedarle seis más. O cinco, puede que menos quizás. Ya sabes, no sabes si está vivo o muerto, y él no te lo va a explicar.
Imaginar que no tienes alternativa pero que tampoco has decidido llegar al lugar en que estás. Saber que titubear significa caer y caer no significa levantarse y volver a empezar. No conocer más palabra que desesperanza y más futuro que la incertidumbre. Saber que el tiempo es relativo, pero que aunque eche a volar, no será la salida adelante que esperas, ni tampoco será del todo real.
Pasado mañana todo puede haber cambiado, porque sabes que la realidad es brutalmente sincera y lo que hoy calla, mañana lo puede gritar, pero tener el miedo a que siga callada es peor que sufrir las consecuencias de conocer lo que te pasará.
Qué ironía, ¿no te parece? Al principio pensaba en la desdicha del gato, y ahora me ufano por querer tener una habitación en su irreal realidad. Son matices, es el tiempo, un último compás. Pero luego, llegado el momento, no habrá alternativa, la vida seguirá adelante, irremediablemente, de forma indiscriminada, como acostumbra a vivir día a día.
Hablarte a ti, por no hablarle al gato, escucharlo a él, por tener algo que escuchar, y quejarme al tiempo, por pasar y no pasar, quizás por quejarse porque sí. Esto se empieza a complicar.
¡Aquí quería llegar! Al camino en que las palabras se quedan cortas cuando un pensamiento necesita escapar de madrugada y no encuentra en las palabras más que mediocres medios de libertad. ¿Qué hacer en ese momento? ¿Escribir o no escribir? ¿Dormir o pensar?
En ese momento te mudas al barrio del gato Schorödinger, porque aunque supieses la respuesta, tienes tantas ganas de negarla, que lo más fácil es dejarte engañar.

26 de junio de 2012

Ni ahora ni pensado

Me aburre la película, ¿a quién pretendo engañar? Me cruzo de piernas, me hago el interesante, te pellizco un poquito y me miras, porque tú con la peli si que estabas embobá.
Carraspeo, empiezo a temblar suavemente, de forma que no lo puedas notar, los nervios a flor de piel, me toca confesar como un miedica, aunque no es así, la verdad.
Me miras, te preocupa que no te deje de mirar, ya no es sólo curiosidad, sabes que algo importante te voy a decir, porque ya hemos pasado por esto antes, y siempre es igual, igual de diferente, quiero decir.
Uhmm...
-Me gustas, de gustarme de verdad, no de que seas mi mejor amiga, ni de que me encantas y tal, me gustas de que me apetece compartir diciembre contigo y mi sofá, me gustas de cambiar mi estilo de vida si a cambio compartimos denominación par, es un te quiero diferente a los demás, de esos que no se conforman con el abrazo, que lo que te quiero es besar. Tenía que decirlo, no me quedaba otra que decirlo para ver si dudar o no dudar era producto del silencio o de que me gustas de verdad. No hace falta que te muevas, ni que parpadees o respondas, no ahora, no hace falta nada, la verdad, simplemente está ahí, nada cambiará si no lo cambias tú, pero si te lo planteas, si te gusto del mismo modo que tú a mi, avísame, por si acaso nos atrevemos a hacer esto funcionar, ¿va?
Pues eso, dale al play, que habrá que ver la peli terminar.

Chapuzón

Agotado, fundido, derrotado, rendido. Se acaba un curso, otro más, y no me queda otra que tirarme a una piscina, con trozos de cesped en los pies y gritar, gritar en el salto, en la caída, en el momento especial e irrepetible que supone ese primer contacto de la piscina con la piel.
Y llega el verano, y el grito se silencia bajo el agua, pero no acaba, sino que se vuelve enorme, estruendoso, porque sólo lo escucharé yo, tú ni imaginarás que realmente me encuentro tan perdido que sólo cerrando los ojos encuentro un poco el camino.
Dando tumbos he completado ya seis meses de otro año que empezó en una Nochevieja que recuerdo como si fuese ayer porque de aquellas aguas turbias vienen ahora mis problemas. Quizás una decisión tras otra me haya llevado hasta donde estoy, pero algo es seguro, había que llegar a ese mes, irremediablemente, y el sentimiento, eligiese lo que eligiese, probablemente fuese el de estar perdido.
¿Y es malo eso? Personalmente, prefiero pensar que eso simplemente es natural, lo lógico, porque quizás, y sólo quizás, ande buscando algo que siempre está mucho más cerca, mientras tanto, salir de la piscina, respirar y con ganas de volver a saltar.

15 de junio de 2012

Cómo por ejemplo, el bádminton

Tal día como hoy hace un año faltaba un año para que fuese tal día como hoy, hoy.
Has visto, echaba de menos decir una tontería, y una vez dicha, dicha queda. Ahora voy a la verdad.
Echo últimamente muchas cosas de menos, y hoy, leyendo una tontería, me he acordado de una cosa que hace muchísimo que no hago y que me apetece enormemente.
Tengo en una esquina de la habitación una raqueta de bádminton, un regalo de Reyes Magos que está cogiendo polvo porque no tengo tiempo, nunca, me he vuelto un experto en perderlo a raudales y no hay manera de que encuentre con quién jugar, es triste, pero no sé, me apetecería simplemente pasarme un par de horas sudando y jugando a tope al juego del volante o pluma, ¿tanto pido? Pues me da que si.
No he dicho nada, pero era de estas cosas, que para los demás, de puertas para fuera, son tonterías, pero hace falta decirlas, o rompen la puerta. Cómo el agua que se acumula en un baño, que más te vale que no se encharque, sino, tropezarás, por suerte, ¡los pomos están inventados!Aunque yo no encuentro pareja...de bádminton, claro

6 de junio de 2012

Paso a paso

Lo guapísima que es una chica es directamente proporcional a las ganas que tenga el chico de verla sonreir...
Pasan un par de días y yo cuando te veo andas más cerca de ser un ángel que una chica corriente, porque  aunque es imposible que se me olviden tus ojos, me parece que no puedo vivir sin ellos...
Uno de mis pasatiempos preferidos es tumbarme en el sofá sin ti y pararme a pensar en encontrar una palabra que te describa, que sea capaz de ponerse delante tuya y sea como un espejo, y se pasan las horas, y no la encuentro, y eso te hace más especial que cualquier vestido corto o cualquier foto retocada.
Algunas no lo entienden, ningún chico lo entenderá, pero saber que existe gente como tú es lo que hace que el sol salga por la mañana, al menos para algunos.
Pero es que da igual, dar vueltas o comentar mil tonterías, al final todo se reduce a lo mismo, ¿que si te quiero? ¿que si me gustas?
No te voy a decir que si, prefiero acercarme a ti, hacer como que te beso, pasarme los labios, llegar a tu oreja y darte un pequeño mordisco, ¿lo has oído? es el ruido que hace el decirte que me tienes loco...

5 de junio de 2012

Calor

Es cuestión de confianza, y de tener un poco de imaginación.
Yo quiero simplemente sentarme, cómodamente, apagar la luz, que entre por la ventana lo justo para ver los ojos, y poco más...bueno, sinceramente, quiero ver un poquito más de las sombras, todo lo que seas tú querré verlo.
Una vez así, te quiero en el salón, pasando calor, que te acerques a mi, que me escuches decirte lo mucho que me gustas, y que te sonrías, le eches maldad y hagas como que me besas...pero te me vuelves a alejar.
Verte alejarte, mover las caderas, no sé si lo haces con maldad o simplemente es naturaleza, pero ¡madre mía! mi corazón va a estallar.
Y frente a mi te quedas mirando, como esperándome a parpadear, y se me escapa el parpadeo, y te empiezas a mover, tus manos van a tu camisa, que antes de resistirse, acaba en el suelo.
¡Dios, que sufrimiento celestial!
Imagino que ahora tu falda debe molestarte, y tú me lees el pensamiento, porque te la empiezas a bajar, y cuando acaba en tus tobillos, bendita suerte la mía, empiezo a ver que eres de verdad.
No sé cómo aguantas la tensión, porque yo voy a destrozar el sofá, y más cuando escucho ¡click! ¿qué te acabas de quitar? Me lo imagino, abro de nuevo los ojos y flipo, y ya...
Otros ojos no van a mirar, te chiflo, te sonrojas, te alegras de que Dios exista (si alguien te ve creerá en él) y te acercas lentamente, pero sin parar, paraliza el momento en el aire, instantes antes de quitarme el aire, se me escapa una tontería, una niñez propia de los nervios...
¡¿me dejas quitártelas yo?te prometo que no usaré las manos...!

2 de junio de 2012

Un par de perlitas


Venga, soltar a las tres de la mañana un par de perlitas tontorronas, de esas que te amodorran, que las lees meses después y te avergüenzan, de aquellas tan necesarias cuando ves que o las sueltas o revientas.
Cómo romper a llorar, supongamos que rompemos a escribir, que lo que ahora lees realmente no tiene importancia si tú no se la das, que lo que ahora lees a partir de ahora puede cambiarse palabra por palabra a lo que tú quieres escuchar. Eres tú quién lee, ¿qué mínimo que decidir lo que piensas creer, escuchar, llama X a aquello que al final es interpretar?
Supongo que habrá maestros, que habrá gente que le pone afán, que la virtud de lo escrito está en decir algo sin pretender decir mucho más, en que se note sencillo, sea sencillo y grite a voces algo que es tremendamente difícil de explicar, ¡ay quién tuviera tal virtud! Mi envidia malsana provoca, la verdad.
Pero como no era eso a por lo que vine a hablar, ni por lo que llegaste a leer, soltar el par de perlitas, las dos tonterías que nunca están de más:
No te canses nunca de reir, porque de llorar sí que te vas a cansar.
No pienses que algo se acaba, piensa que algo empieza, porque realmente sólo hay un final, el resto, es una carrera, un…”no parar”.

No es una prueba más


Quiero pensar que esto tiene un valor por lo que sucede, no por lo que vale para un futuro, quiero eliminar la palabra prueba de la ecuación, hacer sencillo lo difícil, asumir que despedirse, como nacer, es tan sencillo que uno lo hace por naturaleza…
Una de las pocas cosas que hacemos por naturaleza, además; cómo ese llorar de pequeños, y luego más tarde, de adultos, para reflejar lo que pasa por nuestra cabeza, por nuestro corazón, por…bueno, depende de en qué quieras dividirte, ¿no?
Y buscar la vida fuera, en la absurdez del sueño que aparece mirando al cielo, y no descubrir el poder que tiene la levadura, o la asombrosa explicación de la espuma de una buena cerveza. Pequeñas cosas, grandes explicaciones, la sencillez nunca será lo suficientemente valorada, por eso mismo es sencilla, supongo.
El feliz, el insensato, la ingrata, el desdichado, la virtuosa, la tolerante, el indiferente, el atrevido, cualquiera de aquellos que dijeron trazar su senda, acabaron desembocando en la misma posada, ¿realmente importa lo que caminas?
Deberíamos creer que sí, porque si no, todo vale, y al fin y al cabo, esto no es una prueba, pero tiene sus reglas, aunque… ¿te apetece romperlas?
Sé sincero contigo mismo, como a todos, las reglas, dices, están para romperlas…

21 de mayo de 2012

La búsqueda del reino perdido...

Faltan princesas...perdón, digo princesa...falta paciencia, perdón, le robo historia al tiempo.
De ser viento de aquel que se mueve...que tontería, ¿qué es el viento, sino aire que no se detiene?
No estar aquí, por aburrimiento, por cuestión de sinsabores o por mero hastío. Tampoco estar allí, en tal o cuál compañía idealizada, por no renunciar a los principios, a la dignidad, a la historia que pretende uno mismo escribir.
Decidir que se preferirá vivir con el tesoro de la esencia propia que con la compañía del vulgar "amiguismo". Somos diferentes, aunque no lo quieras, pero seguro que aunque no lo veas, acabas cayendo en la cuenta, de que la cuenta difícilmente se queda en una única moneda.
Tú eres la moneda, el pago de esa deuda que es la llegada al final del camino, y tener que compartirla es lo habitual, puede que lo sano, pero ahora me da igual.
Me guarde en el bolsillo el precio de la vida, empecé a echar cuentas y las cuentas no salen, pero eso no significa que no vaya a resolverse la ecuación, aunque para ella haya que romper un par de cristales...
Buscar princesas, sueños o simplemente buscar el trono que a cada cuál le toca poseer en el reino de la vida, no encontrarlo en esta vida...cambiar la vida, antes de que esta acabe sin más, esa es la victoria, el encontrarte antes del final.

15 de mayo de 2012

Deseando que llegue el Alba

Hoy es una de esas noches andaluzas en que no se puede conciliar el sueño. No apetece ni cenar, del calor que hace.
Te dan las tantas sin hacer nada, pierdes el tiempo sin saber cómo, aunque sepas que el día siguiente pagarás las consecuencias de ese coqueteo con la perezosa sensación de asfixia en que vives de noche.
Esta noche, mala noche, noche de tontería, noche sin valor, noche que no pasará a la historia de las noches, pero mira, tiene personalidad.
Maldita sea la calor, esa amiga con la que el sureño se siente identificado, tanto como para llamarle "el calor". Enseñanzas de una madre tierra que escarmienta, porque no soporto los aires acondicionados, me dan tanto o más dolor de cabeza que el bañar en sudor una almohada...
¿Qué queda para que sean las siete de la mañana? Por favor, dame prisa, hazme pasar rápidas las horas, necesito descansar, aunque sólo sea entre ese tramo que va desde el alba, con esos primeros rayas fríos de luz hasta que suene el despertador; si total, luego pienso apagarlo.
Mañana será otro día, pinta igual de caluroso, no digamos igual de mal, porque eso hasta mañana no se sabrá, mientras tanto, no digo buenas noches, porque no lo son, digamos calurosas noches, y esperamos que te pases por aquí, que te apetezca comentar, en noches como esta, en que no me veo capaz de pensar, necesito que alguien diga algo, pero necesito que quién lo diga, esté acostumbrado a pensar...

10 de mayo de 2012

Palabras clave


Te despiertas una mañana, no desayunas, vas tarde, apurado...
Llegas a la biblioteca, un día más, tampoco parece que hoy te vaya a cundir especialmente esa tontería que tienes que estudiar...
A media mañana se acerca una chica. Te suena, es muy mona, aunque no la conoces personalmente, la has visto por la facultad.
Que cosa más rara, se presenta, te dice que estudia lo mismo que tú, y te preguntar por unos apuntes que casualmente tienes.
Tú te sonríes, piensas para ti...esta chica siempre está riendo, me acuerdo de hacer un par de años, cuando la veías pasear y tenía esa risa...No debe ser fingida, la alegría no se puede fingir demasiado tiempo.
No existe la casualidad, por supuesto, lo explicas, te lo explicas, se lo acabarás explicando a la larga, pero si existiese, ahí se dio...
Empieza un nuevo curso, y bueno, por H, por B o por L, vete tú a saber, coges confianza. Como para no cogerla, que pedazo de pan, en serio, tú porque no la conoces, pero te digo yo que algún personaje bíblico es afortunado. Guiño.
Total, que cuando no puedes ver más bondades en la chica, ves que la chica tiene una amiga que es también pura bondad, en el sentido de la representación de todo lo bueno que puede verse en alguien...
Vaya chica mona la amiga de la chica mona, vaya dos monadas de chicas, en definitiva...
Tienen esa sonrisa que hace que las historias mediocres de chicos que no tienen nada mejor que hacer mejoren, son, como decirlo...la causa principal de cartas de amor en el instituto, la reacción química que mayor cantidad de arrugas provoca en la comisura de unos labios...No hay que volverse loco con ellas, porque lo que les digas será poco...
Debo haberme enamorado de las bibliotecas, debo pensar que echaré de menos algo que apenas si tengo, pero es que es difícil no coger cariño a aquello que se hace querer porque está hecho de diversión, pasión y sencillez...
Y ya empiezo a echar de menos ese reproche tonto que me hace mirar junto a la escalera para ver si tengo o no que comprar chucherías...lo empecé a echar de menos hace un mes...
Pero aquí prometo algo, la palabra clave, hace cuatro años, de pura casualidad, le dije un día a una chica que algo le pasaba porque no la veía sonreir...ahora que conozco a esa chica, ella y su amiga deben saber, que por lejos que se vayan, ya sea a México, a Estados Unidos o a Madrid, seguiré preocupado por ellas, porque los peluches sólo pueden hacerse querer...

2 de mayo de 2012

Las palabras más...

Estas son las palabras más...
Un día leí que la palabra más hermosa del español era albahaca, ¿puedes creerlo? Sorprendente pero...
Bueno, cuestión de gustos, nada habrá universal ni absoluto...Es una tontería como otra cualquiera, una tontería de esas que tanto gustan.
¿A quién le importa el número de escalones que tienen los tres pisos que llevo subiendo desde que tengo dos años? A mí no, desde luego... ¿Y a quién le preocupa si es cierto o no que Shakespeare y Cervantes murieron el mismo día? Son tonterías, las recuerdas porque hay cosas que tal vez no quieres olvidar...
Tú tal vez nunca te fijaste, pero puede que alguien sepa que tienes unos ojos que hechizan...o puede que simplemente él los vea así. Realmente, ¿importa lo que seas o lo que parezcas? ¿Lo que vean o lo que opinen?
Ser y parecer son dos coches que van por carriles paralelos, aunque a menudo la vida a fuerza de volantazos los acerque peligrosamente...
Da igual que parezcas vanagloriarte de tu fragancia, que sepas que eres especial, también da igual que la venganza escupa crueldades sobre ti o que una lengua bífida trate de embaucarte con la hermosura.
La belleza, la sabiduría o cualquier virtud/defecto universal dependen de un estado de ánimo reflejado en un espejo que muestra lo que queramos ver.
Te preguntas qué quiero decirte con esto, no hace falta que lo preguntes, sé que lo preguntas...
Quiero decir que no importa lo que seas, ni lo que parezcas, ni lo que yo te diga ni lo que yo piense, importa aquello a lo que tú le otorgues valor, porque no hace falta que te diga una palabra bonita para saber que las provocas...no que yo quiera sentirlas o que las se las regale a tus oídos, simplemente las provocas...
¿Sabes lo que significa eso?
Pues que estas podrían ser las palabras más hermosas, sólo significa eso...

19 de abril de 2012

Almohada


Las palabras más bonitas son las que callamos, las que acertamos a tartamudear cuando nos miran...
Imposible dejar las manos quietas...¿ponerlas en los bolsillos, en el pelo? Joder, que nervios, me sobran hasta los parpadeos...
Debilidad general de cintura para abajo, algo así como tener las piernas de nata...
La dulce locura de desearte, morderte, ruborizarte...los ojos, esos ojos, joder, me salen tacos en lugar de piropos, que no es poco.
Si hasta puedo rimar, ¡que grima!
Ves, soy gilipollas, espero hacerte por lo menos reir con el patético intento de hacerte feliz.
Por dios, no te vayas, nunca quise quedarme, y ahora no puedo detenerme, correr, volar, partir, volver a casa, llamar a los amigos familia, y a la familia amistad...compañía...verano en inviernos, relojes que son caprichos...
Si Dios existe, me está mirando, nos está mirando, somos tú y yo, yo y tú, dicho de otro modo, las ganas y el terror.

10 de abril de 2012

Fruta

Luz tenue, silencio absoluto...
Se escuchan unos ruidos al final del pasillo, vecinos tal vez...no, realmente no, son gemidos...placer, pasión, hecha voz, palabras que no se dicen pero que se gritan, el terror de una cama chirriante, el dulce sabor de los besos...
Sudor en pleno enero, sábadas desordenadas que sirven de ropa interior...¿hay algo más sexy que verte enrrollarte las sábanas entre la zona prohibida que va de tu cintura a tus pechos? Siiii, si lo hay, saber que cuando vuelvas, yo podré volver a quitarte tanto recato, tanta ternura tras tanto frenesí...
Porque la noche sigue siendo joven, porque las mañanas nunca fueron un impedimento para seguir jugando a ser mayores, porque me encanta merender fresas en tu cuello, o en tu ombligo...porque sé que te vuelve loca jugar con nata...
-Dios...nos están mirando...¿no?
-¡No!Te equivocas, Dios nos está mirando...y se está muriendo de envidia, así que deja de preocuparte, y no te vayas a despegar, aprovecha mis curvas, que somos pura maldad...

Personalidad 1

Pues se me ha ocurrido, de acuerdo con mi almohada, hacer unas cuantas entradas, no sé, las suficientes hasta que me canse, hablando de alguien en particular, a ver si alguien se adivina entre las palabras y quizás, pues le guste verse y saber que si está ahí, es porque a mi, me importa.
Sin más, vamos a por ello.
Será breve, así será doblemente bueno. Aunque el tiempo haya volado, realmente no ha sido tan breve, han sido semanas, meses e incluso años.
He visto crecer curvas, he visto subir y bajar el pelo alrededor de tus hombros, y también alguna lágrima inmerecida. Cambiar de parecer, de amistades e incluso de carácter...espera, de carácter no, siempre me he visto a ti en mi, y viceversa.
Aunque con matices, con ese toque que permite soportar hasta que se tensa la cuerda, y cuando se tensa, siempre a tiempo, (pero a destiempo), se acaba por sonreir. Imposible no reir.
Mañana cambiaré esto, me han tocado la fibra sensible...

9 de abril de 2012

Al mal tiempo, dale tiempo

Por la disposición presente quedan trastocados los conceptos de minuto, semana y año en la medida en que sea posible confundirlos a través de la imaginación.
La supuesta relación inversa entre fortaleza y distancia que debe regir toda relación queda rota en virtud al deseo de un par de voluntades, una que sabe lo que hacer, y otra que sin saberlo, impulsa a la anterior.
Queda supeditado a la suerte, aún en aquellos que no crean en ella, la capacidad de otorgar virtud a través de la risa, aún en las malas, en las puñeteras y en lo incomprensible.
Viene a decirse y a obligarse a cambiar de chip y decir basta, para luego decir...
No existe nada parecido a enterrar la nariz en el pelo de una mujer, ni nada que pueda compararse a la fortuna de tropezarte en un local abarrotado e ir a parar a las manos de un chico que sonríe, pero no por tu torpeza, sino por darse cuenta de que ha cogido al vuelo un ángel.
Tampoco puede comprenderse sin haberlo vivido aquello que viven los que callan, aquello que sueñan los que aguardan su momento y lo que, si le echan valentía y deciden tomar las riendas, sufren o disfrutan, porque sólo el osado, el extrovertido, el dueño de su vida puede alcanzar algo, vivir la vida acompañado.
Para todo lo demás, la explicación está en los libros, pero para estos temas en particular, mejor aprender probando, fallarás, si, pero acabarás acertando.

15 de marzo de 2012

Años atrás

Esto va a ser muy breve, apenas un pellizco, lo suficiente para que puedas sentirlo, para que quede una leve marca y para que sólo lo recuerdes como anécdota y no como algo sentido.
Ver, en una foto, sin darse cuenta, magia, es muy difícil, si encima descubres que esa magia tiene un valor añadido porque tiene una historia detrás, la fortuna realmente te sonríe.
Y de eso estaba yo hablando, de una sonrisa, de la captura del instante en que la felicidad resulta más clara.
La ves, te asombra, descubres que ha pasado el tiempo, y el significado de la misma sigue ahí, gritando que lo evidente... Sonríe tú también, al menos así me verás con mejores ojos...
Supongo que por eso te veo tan bien, porque quiero mirarte bien, porque me sonríes bien.

8 de marzo de 2012

Excusas

Ni falda ni vaqueros, ni camisa ni chaqueta, te lo digo en serio, tú debes usar un buen traje de luces, porque los recortes que me das para evitarme son dignos del toreo.
La lluvia te ha humedecido tanto el pelo que has tardado 30 minutos en volver a ponerlo despeinadamente lindo. Los zapatos preferidos para esta época del año estaban en el cajón más oscuro de un armario que tiene más fondo que un pozo.
El móvil se ha mojado lo suficiente en el lavabo para dejar de funcionar durante unos minutos vitales que hacen que te retrases.
Y puedo seguir así, y puedes seguir así, minutos, horas e incluso días, esquivando mis intenciones, atracando mi tiempo libre y robándolo sin maldad.
Porque relamente yo me dejo, porque cuando quedamos y me toca esperar, o cuando cancelas minutos antes de que tengas que presentarte en cualquier lugar, me quejo de que he perdido el tiempo, pero aunque eso sea verdad, no importa, porque lo compenso con el tiempo que paso contigo y que es tiempo que vivo de verdad.

7 de marzo de 2012

En pequeños sorbos

Dicen que las grandes esencias vienen en pequeños frascos... y la gente piensa que el perfume forma parte de la esencia, ¿no se dan cuenta de que la pasión, los sueños y la vida están íntimamente ligados al sudor y la humanidad más que al perfume?
El mundo se estremece con los grandes momentos, con ese choque de trenes con un puñado de desgracias, con aquel desafortunado asesinato que tanto escándalo público produce, pero realmente, si el mundo somos las personas, no es tan cierto que nos estremecemos con eso.
Estremece ver sin querer por primera vez lo que esconde una falda, asusta descubrir la responsabilidad de que por primera vez tú eres el que paga tus facturas, hace temblar la sensación de que por bien acompañado que estés, cometes un error y puedes quedarte solo.
Las personas forman parte del mundo, pero no son el mundo, el mundo es algo inventado por aquellos que quieren quitar la esencia de los pequeños frascos, embrutecer a todo aquel que se despiste y aprovechar la debilidad de las emociones.
Porque al fin y al cabo, aunque yo mismo piense que las decisiones nos hacen ser como somos y vivir lo que vivimos, sólo con las emociones, con esa sensación de debo saltar o quiero arriesgar es como prende la chispa de la vida.
Sólo en ese momento descubrimos la esencia, pero a partir de entonces, no la olvidaremos.

2 de marzo de 2012

La primera y la última vez

A ver si te enteras, porque va a ser la primera y la última vez que te digo esto.
No quiero ni una foto más frente al espejo esperando la aprobación de tus amigas.
No me da la gana de consentirte una sesión de peluquería y manicura a costa de tus dudas.
No tolero que vuelvas a pensar ni por asomo que algo entre tus tobillos y tus ojos tiene el menor defecto, porque no es así.
No es que seas perfecta, es que no hace falta que lo seas.
Porque ni flequillo para arriba o para abajo, ni rizos o pelo ondulado, ni castaño, rubio o teñido atrevido, nada de nada le importa al pelo si está lo suficientemente mojado. En ese caso, está perfectamente peinado.
Que las faldas a la altura de la rodilla tienen el mismo valor que aquellas que no dan oportunidad a usar la imaginación de lo poco que tapan, que los escotes de vértigo son para aquellas que tienen miedo de que el precipicio sólo sea bonito por el peligro y no por las vistas, que realmente con pijama, muy cerca de tu cama es como más atractiva te veo, es donde encendería realmente una alfombra roja de luces.
Que te queda muy clarito, que no te lo vuelvo a repetir, que te cogería con las muñecas, sin que sintieses mis dedos, te acercaría peligrosamente a mi, te pediría que cerrases los ojos...
¿Piensas que de verdad te besaría? Así, ¿sin más?
No, por dios, me acercaría lo suficiente para que al yo suspirar, suspirases conmigo, y entonces, no haría falta tocar nada más, porque la distancia es relativa, y en ese instante lo podrías notar.

29 de febrero de 2012

A cada cual

Te perdono por ser tú, ese nadie en concreto que me ha convertido, me ha transformado en ese nadie en particular, cuyo mayor objetivo vuelve a ser salvar.
Compenso ahora la falta de fe, el pragmatismo insufrible y la repelencia con un toque de conmoción que me justifique, creo ahora más que nunca que tenemos muy poco en que creer ahora que hemos crecido, y que si antes no entendiamos lo que era dios, si en el futuro lo temeremos, ahora estamos en el momento de perderle tanto el respeto que casi no contamos con él...
Mal consuelo para el descarriado es no tener ni un clavo ardiendo al que agarrarse.
Pero esta es mi reflexión, ahora está tu recompensa por llevarme hasta ella...
Quiero que comprometas cada centímetro de la distancia que separa tus tobillos de tus ojos en la cautivadora sensación de escuchar mi respiración, porque yo apostaré el resto en jugar a fichas blancos con eso de que puedo hacer saltar la banca con un mordisco en el momento adecuado y en el lugar idóneo.
Necesito desesperadamente que creas que si te empujan, siempre caerás sobre mi, que la caída, por oscura que sea, podrá parecer siempre un vuelo del que disfrutar, y no la antesala de un golpe del que no te levantarás. Porque en esa actitud estará la clave de nuestra supervivencia, en saber decir cuando y como ponernos el mono de trabajo o el disfraz de disfrutar.
No habrá florituras en la obra más tierna, pero no por eso dejará de saber a azúcar, no encontrarás palabras dulces cuando llores, pero sabrás que esas lágrimas además de curarte, serán la cura para las que yo no pueda llorar.

7 de febrero de 2012

Sting

Tú que buscabas aqui el lugar en que reposar, tras tanto tiempo sin ver si había asientos suficientes para la actuación que nos viene encima.
También tú, que esperabas de mi superarme, robar de las palabras algo que no tenga mucho sentido pero que tú lo sientas...
Finalmente tú, que eres fiel, que la lealtad como premio para ti no es más que seguir disfrutándola.
Son valores que no se pueden medir, que  crecen sin darte cuenta y cuyo valor reside en la voluntad que uno quiera ponerle. Es siempre volver al mismo tema, a la magia que tienen los lazos que nos convierten en humanos, pero sabiendo que no sólo de amor vive el hombre, ni el dolor de pies significa que uno quiera dejar de caminar.
A menudo reducimos las preguntas mucho, esperando obtener respuestas fáciles, y te das cuenta de que nunca eliges el tipo de respuesta, ni lo que para ti implica, por mucho control de las preguntas que tengas.
Por qué no pruebas a dejar de preguntar si esa chica será la definitiva, si tu vida podría mejorar de haber decidido comprarte una chaqueta en lugar de un par de zapatos, y así, a lo mejor, con suerte, un día, alguien te pregunte algo que no pueda responder, y tú seas capaz de decir, "esta respuesta me la sé".

16 de enero de 2012

¡Porque la vida puede ser maravillosa!

Como un triple en el baloncesto, como un jaque mate en el ajedrez, como el primer beso con lengua, como la botella de agua cuando tienes verdadera sed.
Podría definirse así la situación en que sabes que el próximo momento tardará en llegar pero todavía estás disfrutando del presente. Podría dibujarse en una pared el número de dedos que muestran las oportunidades que he tenido de verte reir de verdad.
No me gustan los "jejejeje", no porque no me los crea, porque motivos para creerlos me das, simplemente creo que es injusto que con lo mucho que me cuesta provocarlos, esa especie de cosquillas no las pueda yo ver.
Dices que quizás...uhmm, se me acaba de olvidar lo que te iba a contar, bueno, no sé. No tengo demasiado que añadir, porque creo que esto no ha hecho más que empezar.
Pero pediré un deseo, que los deseos, si apetece que se cumplan, no se ahoguen en la orilla, porque con lo que cuesta nadar...mejor no pensar en eso, mejor reir, ¿va?

13 de enero de 2012

Casi poesía

Morderse el labio, abrir las piernas, soltarse el pelo y provocar con colorete.
Purpurina la justa, pero sin que falte, tacones bien altos, pero para que bailes.
Sonrisa de pilla, uñas coloreadas, nervios de bailarina antes de saltar al escenario y suspiros de los nervios de quien afronta un examen.
Cierras los ojos, tienes 18, estás en el momento en que no se cierran puertas y además siempre hay ventanas. ¿Qué puede fallar? ¿El chico, el lugar, el momento?
Yo te explico mi plan, es un plan de palacio, para que no se detenga, para ir despacio.
Me apuesto dos rimas, me quemo encendiendo velas, me enfado porque se apagan y tú todavía no llegas. Tuerzo el gesto sólo un momento, es lo que tardo en recordar porque eres tan diferente y porque te invité a cenar.
La cena a tu gusto, la peli que quieras, en quince minutos, la tele se apaga y llega el momento.
En tu descripción, me faltaba la ropa interior, que resulta ser de encaje, confirmando algo bueno, estás preparada, lo sabes, lo siento, hace frío, acércate despacio, hagámoslo muy lento, ¿el qué te preguntas? Ser un solo cuerpo.

12 de enero de 2012

Que no importa lo repetido

http://www.youtube.com/watch?v=W3rKyxvwF90

El sudor en la frente hace que te sientas más vivo, completamente vivo. 
Justo antes de que todo se acabe, de que cierres los ojos y te repitas a ti mismo que no quieres despertarte cuando te duermas, todo ese calor que te consumía acaba por explotar...
Tienes los ojos cerrados y es cuando más vivos ves los colores, porque no te limitas a verlos, los puedes imaginar, soñarlos, dibujarlos, ponerlos donde te de la gana, para eso están donde están, dentro de ti.
Despacito se acompasa la respiración, muy suavemente se va la tensión de los dedos y descubres que puedes no sentir lo que tocas si dejas de darle importancia a lo material...
Parece que todo se apaga, pero justo entonces.
...
Estás vivo, joder, en un momento perfecto de tu vida, el presente, esa realidad que sólo tú puedes cambiar, esa incomprensible materia prima que fabrica sueños cuando le pones voluntad. Eres la agrupación músicos que tocaban a los pies de San Pedro, eres la partícula vital alrededor de la cual gira un mundo que a veces no parece importar.
Pero importa, y es real, tan real como los sueños pueden serlo, y tan imaginado como te apetezca.
Y grita, con toda tu alma, rasgando tu garganta, partiendo a donde estabas antes...con los ojos cerrados más allá.
El sudor sigue bajando por tu cara, lo pruebas y sabe a sal, te guste o no te guste, te hace sentir vivo y real.

10 de enero de 2012

Rosquillos

¡Rosquillos! ¿Hay alguna palabra menos romántica? Seguro que si, pero es que yo ahora tengo hambre, es de noche y tengo a mi izquierda un buen puñado de ellos, y claro, se mezcla el hambre con las ganas de comer, y me enamoro de la sola idea de comerme unos rosquillos...la gente hace especial a la gente, y no la gente especial hace a la gente especial como se cree... En última instancia, el ser especial no es algo innato, es algo que te viene dado por aquel que te mira...
Dice esto alguien que se cree especial...Como todos los demás, ¡qué verdad!
Me falta sensibilidad para mirar, un poco de tacto para oler y algo de ojo a la hora de elegir cuando piropear, pero lo compenso con la capacidad innata de hacerte sonreir, sé que esa es mi virtud, ¿verdad?
Y luego está otra realidad, otra cosa que no me puedes negar...te apetecen rosquillos...te apetece másticar, probar eso que sabes que has probado mil veces y que mil veces probarás...el crujir de los rosquillos me recuerda a...uhmm, ahh...uhmm, pues eso, que se me hace de noche, que tengo hambre, así que ve pensando qué quieres para desayunar.

9 de enero de 2012

Enero

Voy a hablar poquito, voy a decirlo en breves, voy a acortar las distancias, ¿vale?
Este año promete, como todos los prometedores años anteriores, me contará algo así como...
Que tocará elegir, y cada elección será más difícil que la anterior, y cada camino que se tome reportará un sabor distinto, y amargo a ratos, al final seguro que el futuro será mejor que el  pasado.
Y la gente entrará en mi película, y se marchará, y tomará su guión, lo hará pedacitos e improvisará, yo seré el director, y lo permitiré con una sonrisa de oreja a oreja, ¡me gusta la espontaniedad!
Sucederá en Sevilla, en Palma o en París, sucederá mientras duermo, mientras me enfado junto a la almohada, mientras juego a fútbol y mientras me tomo un cubata, lo que yo decida provocará las cosas, y lo que yo enseñe no será nada comparado con lo que aprenderé...
Así será 2012, un año especial, como todos los demás años, con la diferencia particular de que este año en lugar de buscar alguien especial, buscaré primero ser alguien, luego hacer algo especial, y el resto, pues pasará...