Creo que ahora mismo mi vida no es de universitario, al menos no puramente de universitario, porque si es así, voy a necesitar parar un rato de vivirla, porque necesito sueño, muchísimo sueño o más bien cansancio, aunque no sé exactamente de que, porque de divertirme no me canso, seguro.
Vivo a tope, mejor imposible, es que no encuentro nada que cambiar, al menos, todavía no porque todo está siendo maravilloso, sin embargo, hay cosas que no sé...me dan sensacionse raras...
Y si me estoy engañando, las cosas pasan cuando tienen que pasar, y no asumirlas puede ser malo, pero es que no quiero dejar nada atrás cuando tengo tanto en este momento.
Yo siento muchas cosas todavía, pero ya no sé si creo o no en la historia, en la que siempre me he sustentado para defenderme de mis errores...ahora vivo otra historia totalmente distinta y me alejo cada vez más de mi pasado...y yo no quiero eso...¿o si?
Mucho de lo que escribo ahora no tiene sentido, no todo lo que pienso soy capaz de escribirlo, y eso antes no me pasaba, y no sé si quiero que me pase...sería muy sencillo terminar ciertas cosas, romper cuerdas que me aten, y ser completamente feliz...pero eso no lo quiero todavía, no mientras todavía recuerde...
No saber que hacer me puede dar pistas, me puede decir que hay cosas que se acaban aunque uno no quiera y que olvidarlas es lo mejor...pero no saber que hacer también me dice que me está matando el problema, y que por lo mucho que me importa no veo las cosas con la claridad con que vería los asuntos menores...
Estoy liadísimo, y si no fuese porque tengo tantas cosas que llevar para adelante que no me da tiempo a pensar en las malas, no estaría bien...no sé que quiero...si sentirme mal y tratar de arreglarlo...o sentirme bien y tratar de olvidarlo...puñetera distancia...bendita distancia...ella es la excusa y el mal de todo problema...
Quiero escucharme a mi mismo, quiero ver que quiero y así actuar en consecuencia...¿por qué es tan complicado escucharse a uno mismo cuando uno más lo necesita? Será porque somos humanos, y lo que más nos gusta es ser felices, y lo que menos nos cuesta es engañarnos...
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