Reconocelo

Reconoce que lo echas de menos, que no te arrepientes, por supuesto, pero que está ahí sin estar...

Los recuerdos son tan dulces como amargos, pero a menudo te roban una sonrisa, ¿no crees? Y además, sabes que todo es cuestión de tiempo, de paciencia, se puede recuperar cualquier cosa que se haya perdido, y al final te darás cuenta de que quizás, tanto anhelo no era necesario, pero tú eres así, todos somos así, no sabemos lo que queremos, ¿¿qué tiene eso de malo??

Y a mí me gustará más el presente, y a tí más el pasado y el futuro, y a los dos nos gustará siempre quejarnos, y echar la vista atrás, y al final dará igual, el momento es lo que importa, y echar de menos está de más, cuando se está bien o cuando se está mal, porque total, como te he dicho, lo que una quiera regresará, y si te vuelves a querer equivocar, ¡tendrás tu oportunidad!