27 de enero de 2010

Israel...

En 1945 finalizaba la IIGM (Segunda Guerra Mundial), tras de ella una Europa arruinada asomaba de sus cenizas, y una historia todavía más terrible que el mundo parecía haber dejado de lado durante la guerra y ahora se espantaba al descubrir...
Millones de soldados habían muerto en el frente, civiles a causa de bombardeos y represiones también habían caido por millares pero una verdad incómoda ahora se mostraba sin esconderse, la realidad de los campos de exterminio nazi en los que habían perecido, entre otros muchos grupos étnicos menores, casi seis millones de judios...
Los judios restantes, los supervivientes del "Holocausto" pronto buscaron un lugar donde reunirse, donde protegerse los unos a los otros, con el fin de evitar su desaparición, su exterminio en futuros conflictos, con el fin sencillo de vivir en paz tras el horror de su experiencia.
En mayo de 1948, el estado de Israel declaraba su independencia, con el objetivo único de vivir en paz. Fundado por las Naciones Unidas, desde su nacimiento, se discutió si debía o no estar ubicado donde se encuentra, pues los conflictos con sus vecinos árabes (especialmente los palestinos) surgieron ya desde los primeros años del Estado de Israel.
Fuertemente armado, protegido y asustado en todo momento, Israel se ha defendido con uñas y dientes de agresiones más o menos lícitas, luchando con la ayuda de unos E.E.U.U. (Estados Unidos) a los que la inestabilidad de la región les interesa probablemente más que la propia seguridad de unos y otros y su satisfacción general.
Se ha creado una identidad nacional que ya poseía pero que con los años, con los constantes enfrentamientos se ha agrandado en exceso hasta el punto de que actualmente, la paranoia existente en torno a las conspiraciones contra si mismo ha llevado a cometer injusticias y atrocidades, sino similares a las de sus pasados carceleros nacionalsocialistas, al menos rondando el punto de inflexibles y casi inhumanas.
El estado democrático de Israel se está convirtiendo en un tirano disfrazado de oveja que actúa por miedo a que se repita lo que tantas veces en su historia le ha sucedido, y sin darse cuenta, se están convirtiendo en sus propios enemigos, se asemejan cada día más a lo que tanto odian, y de seguir así, provocarán que surjan ideas hasta hace poco denostadas por las barbaries anteriores que pongan en entredicho si debe o no respetarse a los israelitas, que imponen por la fuerza de las armas el temor a unas armas que en el pasado sufrieron, y que ahora que poseen, parecen querer usar por su libertad, pero a cualquier precio...


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