2 de mayo de 2010

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Y viste ese rayo que partió un árbol, viste ese disparo que falló ante el segundo de espera de un enemigo...
No, no viste nada, por dios, no te engañes, dios no existe si no quieres...el problema viene cuando quieres y no lo ves...el único problema que tienen las cosas es buscarles una explicación...
Todo es tan simple cómo una manzana, y sin embargo, gusanos pueden pudrirla...gusanos que son tonterías, tonterías que son palabras estúpidas o de más...la vida es una manzana envenenada, ¿no? Si no la muerdes, te mueres de hambre, y si te atreves a probarla, te acabará matando...ironías de esta perra vida, que cuando mejor deberías estar, mayor puede ser la angustia...
Ahora resulta que la mayor derrota es encontrar la meta, porque se pierden las ganas de luchar...Ahora resulta que no hay victoria más dulce que una derrota tras otra. Cosas que uno no es capaz de explicar, cuanto más claro está el día, más cierra uno los ojos cuando lo mira con ganas de comérselo...
Impulsarse está bien, pero sinceramente, para acabar parándote, hay ratos en los que mejor no arrancar...es triste, pero más triste es llegar...
Y caminan las palabras por tintes de cesped y libros y aún bien acompañadas, no las entiende quien se lo propone, sino quien pasa de ella...total, para que sirve vivir una vida eterna cuando al llegar al final echas cuentas y el valor era el totalmente diferente al que habías previsto...¿no vives lo suficiente? ¿Cuánto es suficiente? Suficiente es lo justo para ponerte una meta realizable e incalcanzable a la vez...

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