Que me encantan los días en que estás más preocupada en que te diga guapa que en sentirte bien, porque acabas el día bien, y sabiendo lo guapa que eres.
Que te quiero con el toque justo de colorete, con ese pelito corto que en verano te hace la reina de las fotos de playa, volviendo loco al viento que se remueve a tu alrededor.
Que tú mandas en tu vida, y en mi vida, y en esas dos trenzas que te pones porque te apetece tenerme a tus pies, pidiéndote una noche de boda más, un silencio incómodamente romántico.
Te veo llegar, y pienso para mí: si algún artista la conociese, la querría para si.
Y no puedo dejar quietos los tobillos de la felicidad que me da tenerte a mi lado, viéndote pasear junto a mí.
Pensarán que mi cara es la de un niño tonto con mucha suerte, porque puede que lo sea.
Pero cuando te vean a tí sabrán que simplemente, encontré a la princesa que cualquiera quisiera querer...
No hay comentarios:
Publicar un comentario