7 de octubre de 2011

Ring!!!!!

Está en la naturaleza, en imaginarte tal y como supongo que serás cuando te despiertas por la mañana y bostezas. Porque supongo que los ángelitos también bostezan, nunca lo sabré con seguiridad sin tu ayuda...
Y es ese deseo de superarme, de cerrar los ojos de madrugada, escuchar mosquitos que me avisan de que alguien me fastidiará el plan, la mañana, la noche, el finde o simplemente el momento, esas ganas de poner en cada palabra un tono elevado que te recuerde que alguien, al otro lado de lo que ahora deberías leer en voz bajita, se emocionó antes que tú, puso todo su empeño en que sonrieses.
Me gustas muchísimo, y no sé porque (o si). Puede ser por esa imagen deliciosamente irreal que tengo de tí, o puede ser por la filosofía de vivir, sentir y seguir adelante, que me obliga a enamorarme, o lo mismo es porque soy tonto, y te quiero como los tontos quieren a las tontas, por impulso, por pasión, por cobardía, porque si.
Se hace de noche, leerás ahora, con sorna por ser de madrugada, con escepticismo por estar el sol fuera, con una verdad absoluta, lo escrito, escrito está, y aprendí a que da igual como termine, si mis intenciones al empezar están intactas al terminar.
De momento no va mal, me faltan un par de puntos que señalar, y te los voy a decir ahora mismito chiquita.
Encima de tu nariz, debajo de tu flequillo (cuando te encaprichas con él), a la altura en que me confesaría, a la distancia ideal para chocar sin explotar, habló de tus ojos, que tienen algo que supongo que se llamará...
Quizás, quizás, quizás, si quieres llamar a los míos, aquí te dejo mi teléfono ocular.
Parpadeo, parpadeo, abrir y cerrar, pedir un deseo...y empezar a soñar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario